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Vasco Press - Viernes, 27 de Mayo de 2011 - Actualizado a las 13:07h
Vista del convento de la Encarnación en Bilbao donde se ha inaugurado hoy un mercado de repostería y artesanía elaboradas en monasterios de clausura. (EFE)
BILBAO. Un total de 48 conventos de clausura, entre ellos dos franceses y uno de Camerún, mostrarán durante el fin de semana sus productos en el octavo mercado de "Los Dulces del Convento", que se celebrará en el Convento de la Encarnación de Atxuri, en Bilbao.
Una de las principales novedades de esta edición es la presencia del Monasterio Santa Clara de Jesús de Estepa (Sevilla), proveedor de la Casa Real con sus yemas, bizcochos y bienmesabe. También estarán presentes los Cistercienses del Monasterio de San Clemente (Sevilla) que presentan los pestiños de miel, cortadillos y mermeladas y las Adoratrices Perpetuas de Berga (Barcelona) que traen, por primera vez al mercado, sus típicos licores catalanes: ratafia, aiguanaf, lacrima christi y crema catalana.
El sabor internacional lo pondrán dos conventos franceses: la Cartuja de Miraflores de Chartreuse, con su licores medicinales, y los benedictinos de Chantelle, con su variada gama de productos para la belleza como jabones, cremas y colonias.
El mercado también contará con la presencia, por cuarto año consecutivo, de los cistercienses de la Abadía de Nuestra Señora d'Aiguebelle de Koutaba (Camerún) que cultivan café arábica de gran calidad a 1.100 metros de altitud y que siempre es el primer producto en agotar sus existencias.
El público podrá adquirir además los productos de las clarisas de Salvatierra, que elaboran sus trufas y repostería con cacao ecológico cultivado en otros conventos de la orden en Ecuador. También son conocidas las 31 variedades de mermeladas y gelatinas con sabores tan dispares como nectarina, membrillo al café, sandía y zanahoria.
Destaca la repostería de las hermanas trinitarias de Martos (Jaén), con una amplia y refinada gama de empanadillas, o los productos da las Bernardas de Jaén, entre los que sobresale su pan romano, elaborado con pasas, anís y almendras, los pestiños y dulcehojas.
También destaca la repostería de las Clarisas de Santa Cruz (Córdoba) o los bizcochos marroquíes y delicias mejicanas del convento sevillano de las Concepcionistas Franciscanas de Écija.
El mercado contará con la miel y la jalea de las abejas carpáticas del monasterio de San Benito en Zaragoza, recolectada en las montañas de Aragón, de un color casi blanco y habrá espacio para los jabones del monasterio cisterciense de Santa María de Armenteira (Pontevedra), elaborados por las monjas con hierbas aromáticas y aceites vegetales, mientras que para el cuidado de las digestiones, el monasterio también cisterciense, pero éste masculino, de Santa María La Real de Oseira (Ourense) trae el "Eucaliptine", un licor elaborado mediante una combinación de hojas de plantas medicinales.
Además, los Cistercienses Trapenses de Cóbreces (Cantabria) ofrecerán su queso curado de vaca que maduran en una bodega que hay bajo el altar mayor del monasterio.
Los conventos destinarán lo obtenido por las ventas a reparaciones, obras y otras necesidades de los edificios donde viven. Algunos han dedicado una parte a hermanos en países donde mantienen misiones.
El pasado año más de 10.000 personas pasaron por el mercado, donde se adquirieron 9.500 kilos de pastas y dulces, 1.000 tarros de mermeladas y confituras, 820 quesos, 1.000 botellas de vino, 500 jabones de mano, 50 kilos de café y 150 kilos de miel .
